A raíz de alguna foto que hemos subido recientemente a redes sociales, nos han llegado bastantes comentarios. Por ejemplo, que como nos dedicamos al mundo del fitness, pues para nosotros es más fácil estar en forma y tener un porcentaje de grasa bajo.
Pues en parte sí, pero no por las razones que estás pensando.
Nosotros también trabajamos (y no, cuando atendemos clientes no entrenamos), también tenemos obligaciones familiares (un hijo) y también nos gusta hacer vida social y divertirnos. Nuestro día a día no es tan diferente al tuyo.
SOMOS IGUALES
Es decir, también tenemos que sacar el tiempo para hacer ejercicio, cocinar y descansar 7-8 horas diarias.
Al igual que tú, tenemos nuestra jornada de trabajo, donde:
- Atendemos clientes.
- Investigamos, estudiamos y actualizamos nuestros conocimientos sobre ejercicio, nutrición y salud en general.
- Escribimos para brindarte información en este blog.
- Exploramos nuevas formas de ayudarte (estáte pendiente, porque pronto lanzaremos nuevamente el servicio de entrenamiento online).
- Y muchas otras cosas: aprendemos sobre páginas web, marketing digital, etc.
También tenemos un hijo, con todo lo que ello conlleva: colegio, estar pendiente de los deberes, actividades extraescolares y la batalla diaria por brindarle la que esperamos que sea la mejor educación a nuestro alcance.
Eso implica, por supuesto, que como pareja tenemos a veces puntos de vista diferentes, incluso en lo relativo a su alimentación. Si tu hijo no se toma las lentejas, ¿se queda sin comer hasta la hora de la cena, o le haces otra cosa para que la pobre criatura no pase hambre?
Y además, tenemos nuestra vida social y nuestras aficiones. Salir a tomar una cerveza con amigos, ir al cine (con palomitas) o tomarnos una pizza de vez en cuando son algunas de las cosas que nos gusta hacer.
Y no por ello estamos traicionando nuestras creencias ni nuestro estilo de vida. Dentro de unos hábitos saludables, también hay espacio para ser flexibles.
Por eso huimos de los conceptos de “comida trampa” o “dieta”. Porque tienen asociado un sentimiento de culpa, de estar fallando, que es innecesario. ¡Olvídate de las dietas! A largo plazo, es más probable que veas resultados duraderos si buscas una nueva forma de relacionarte con la comida con la que te sientas cómoda/o.
SOMOS DISTINTOS
Por otro lado, sí nos diferenciamos en algo. Al dedicarnos al fitness y la nutrición, tenemos más conocimientos y experiencia que la mayoría de la población. Eso normalmente nos permite tomar mejores decisiones y obtener mejores resultados.
Tampoco tenemos todas las respuestas, obviamente. Y por eso nos esforzamos en seguir aprendiendo y mejorando cada día. Solo así seremos capaces de ayudar cada vez a más personas.
SOMOS REALES
El mensaje principal que queremos transmitir hoy es que somos de carne y hueso. Somos personas como tú, con obligaciones laborales, familiares y sociales. Que tenemos nuestros gustos y caprichos. Que pasamos por problemas y días malos donde la pereza es más grande que las ganas de entrenar.
No somos modelos perfectos ni tenemos un radar alerta para desterrar de nuestras vidas todo aquello que no sea 100% fitness.
Aun así, muchas veces somos los bichos raros por nuestros hábitos de alimentación y ejercicio. Y es que cuando desayunas el pescado que sobró la noche anterior, pruebas una cosa llamada cetosis o te cuelgas de un árbol para hacer dominadas, muchos piensan que te has escapado del manicomio.
Pero como dice la canción: “No estamos locos, que sabemos lo que queremos…” Bueno, a lo mejor un poquito sí, jaja